Invitamos a dos jóvenes para que nos contaran cómo vivieron la «Pascua Juvenil Calasanz» celebrada en el colegio en esta Semana Santa. Isabella Villamarín Gallo, egresada del año 2018, y Miguel Ángel Hurtado Ayala, estudiante del curso 11A, respondieron gustosos y hoy queremos compartir sus experiencias con ustedes.
Invitamos a dos jóvenes para que nos contaran cómo vivieron la «Pascua Juvenil Calasanz» celebrada en el colegio en esta Semana Santa.
Isabella Villamarín Gallo, egresada del año 2018, y Miguel Ángel Hurtado Ayala, estudiante del curso 11A, respondieron gustosos y hoy queremos compartir sus experiencias con ustedes.
JUEVES SANTO
El jueves 14 de abril de 2022 nos encontramos exalumnos, amigos, conocidos, niños, jóvenes, adultos, y familias calasancias con el propósito de celebrar en comunidad la Pascua.
En la capilla el Padre Juan Carlos Sevillano nos explicó el significado de la Pascua. Yo me quedé con esto en el corazón: “Las Pascua el paso de Jesús por nuestras vidas”.
Para romper el hielo cada uno de nosotros se presentó seguimos con una dinámica de citas para conocernos, hablando sobre qué nos había traído a vivir la Pascual, quién era la persona que más amábamos, cómo nos dábamos cuenta de ese amor y a quién le habíamos servido en el último tiempo, explicando que habíamos hecho por esa persona.
Después leímos un cuento en pequeños grupos y conversamos sobre las etiquetas —positivas o negativas— que nos ponemos y cómo Dios nos ayuda a discernirlas.
En la tarde celebramos la última cena del señor: doce personas, entre mujeres, hombres, niños y niñas, se descalzaron para dejarse lavar sus pies por Jesús. Con sencillez, el Padre Juan Carlos lavó, besó y secó sus pies como símbolo de Jesús invitándonos a dejarnos ser servidos y cuidados por él primero.
El día terminó con un momento de adoración al Santísimo.
Isabella Villmarín Gallo
VIERNES SANTO
El Viernes Santo se llevaron a cabo actividades muy precisas en cuanto al objetivo vocacional de cada una.
Por la mañana transitamos el Viacrucis, con estaciones repartidas en distintos lugares del colegio, que nos ofreció elementos claves para hacer frente a la realidad.
Además de leer las lecturas correspondientes a cada estación, tratamos de reflexionar acerca del sentido de cada una, su trascendencia y su aplicación al contexto individual de cada uno de nosotros. Esta reflexión la escribimos en una hoja que dejamos bajo llave durante el rito de adoración a la cruz, en horas de la tarde.
Todo el día tuvimos presente el sentido y la sabiduría de la cruz, símbolo fundamental del cristianismo, resumidos por el Padre Juan Carlos de la siguiente manera:
- Enseña a hacer frente a la realidad: la acoge, la afronta, encuentra caminos y decide.
- Otorga luz y fuerza.
- Se fundamenta en el amor: ¿Por qué Jesús fue crucificado? Por amor. Por ofrecer una manera de vivir que le permite al ser humano encontrar la forma de asumir la realidad, sea cual sea.
Miguel Ángel Hurtado Ayala
SÁBADO SANTO
El Sábado Santo fue un día muy hermoso, celebramos el acontecimiento central de nuestra fe: la entrega por amor de Jesús para hacer frente a la realidad.
Esta entrega genera un efecto que produce vida y vence las dinámicas del egoísmo. Libera, alegra y genera esperanza independientemente de la adversidad de los contextos; impulsa a los seres humanos a defender y cuidar la vida de todo ser humano y todo lo que hace posible la vida humana, incluyendo el ecosistema que habitamos.
Durante este día hicimos un ejercicio de caminar en grupo, alrededor del colegio, con los ojos vendados, solo con la ayuda de unos guías. Una vez terminamos la actividad tomamos conciencia de que ya estábamos en la luz. Conversamos sobre las maneras de cuidar la vida humana que entendemos como sagrada: la nuestra, la de los demás y la del ecosistema que habitamos. Compartimos las ideas que tuvimos para cuidarlas y fuimos por la leña, para quemarla como símbolo de la vida biológica que se termina en la Cruz y por la acción del fuego se transforma.
En la noche nos unimos a la comunidad y celebramos la vida, la luz y la resurrección. Escuchamos las lecturas, acompañamos la bendición del fuego y del agua y con alegría, dijimos juntos: ¡Ha resucitado!
Miguel Ángel Hurtado Ayala