El pasado viernes 9 de septiembre la comunidad educativa del colegio Calasanz celebró las «Bodas de Diamante Sacerdotales» del Padre Urbano Pesquera Franco Sch.P.
El pasado viernes 9 de septiembre la comunidad educativa del colegio Calasanz celebró las «Bodas de Diamante Sacerdotales» del Padre Urbano Pesquera Franco Sch.P.
Con motivo de esta efeméride, un grupo de padres escolapios, encabezados por el Padre Provincial, viajó desde las demás presencias escolapias de nuestro país para sumarse a la celebración.
La Eucaristía de acción de gracias fue presidida por el padre Juan Carlos Sevillano Gutiérrez y concelebrada por los padres Urbano Pesquera Franco, Jaime Guerra Gómez, Mauricio Gaviria Restrepo, Carlos Retana Charlán, Manuel Latorre Ferrero, Juan Carlos Echeverri López, Adriano Uribe Santos y Juan Carlos Gómez Ramírez.
La homilía estuvo a cargo del padre Juan Carlos Sevillano Gutiérrez y en ella resaltó con especial ahínco la fidelidad del Padre Urbano; cómo la vocación de Dios y el compromiso del hombre son continuamente renovados de modo que la promesa del señor a sus discípulos, «yo estaré con ustedes todos los días«, brinda seguridad y garantía para enfrentar los compromisos y retos que surgen en la vivencia cotidiana del llamado especial de Dios. Hizo el padre Provincial un llamado especial a los jóvenes de la sección de bachillerato que asistieron a la Eucaristía: «No tengan miedo»; porque el padre que siembra en el corazón y llama, será el mismo que dará la fortaleza necesaria para servir con idoneidad en la mies a la que envíe a sus hijos amados. Muchos testimonios podrían aducirse para respaldar esta afirmación, pero basta el brillo de una vida vivida con este espíritu para darse cuenta de la verdad palmaria que la anima.
Desde su ordenación el 26 de mayo de 1956 el Padre Urbano ha servido a los niños y niñas según el carisma de San José de Calasanz; trabajó inicialmente en el colegio Calasancio de Madrid durante cuatro años, al cabo de los cuales se embarcó para América con el fin de fortalecer a la nueva Viceprovincia de Colombia y Ecuador. Desde que pisó nuestra tierra, solo la ha dejado para visitar a su familia durante los períodos de vacaciones. Perteneció a la Provincia de la Tercera Demarcación (actualmente Provincia de Betania) hasta el año 2006, en que solicitó ser integrado formalmente a la Provincia de Colombia (actualmente Provincia Nazaret) y trabajó en los colegio Calasanz de las cuatro ciudades en que los escolapios tienen presencia: Bogotá, Medellín, Pereira y Cúcuta. Ha sido aquí en donde ha trabajado la mayor parte de los cincuenta y seis años que ha dado para la mayor gloria de Dios y la utilidad de sus prójimos.
Al finalizar la Eucaristía, varios miembros de la comunidad educativa hicieron uso de la palabra para expresar el agradecimiento y la admiración que la vida sencilla y ejemplar del padre Urbano despierta en todos: estudiantes, egresados y maestros le hicieron saber todo el bien que habían recibido de él y toda la alegría que se despertaba en ellos al celebrar a su lado esa fecha tan especial.
Se puede decir que el maestro Mario Picón resumió el sentir de todos los asistentes cuando expresó: «Tu labor ha sido hermosa y mereces muchas felicitaciones; ¡feliz día! y que sigas haciendo grandes obras por nosotros, que confiamos en tu labor como
compañero, como amigo y como sacerdote en estas tierras cucuteñas».